domingo, 24 de marzo de 2013

Reflexiones

Tengo 32 años y he vivido una vida que puedo considerar maravillosa! Lo he tenido todo, nunca me ha faltado nada, dios me regalo una familia envidiable, atascada de amor de apoyo, de cariño, de amistad incondicional. Siempre  ha habido alguien para todos los momentos, siempre un abrazo, una caricia, un regaño, un empujón para ser mas y ser mejor. 
He sabido lo q es la amistad, tengo personas en mi vida que me quieren tal como soy y por como soy, personas q me aprecian y ven en mi las cosas buenas q tengo para ofrecer. Nunca me han faltado amigos, algunos se han ido, otros han dejado de serlo y muchos solamente se fueron como el agua dejando su marca en quien soy. Los importantes están aquí en el momento q sea para lo que sea.
He amado, tal vez no como lo soñé, o probablemente tal cual como lo soñé. Siempre quise un amor de novela, con obstáculos, problemas, desaprobaciones y un final imposible. Eso ya lo tuve, ya lo vivi y lo disfrute, es mas sigo disfrutando de la imposibilidad de ese amor y añorando esos brazos que se no volverán. Me han amado también, sin esperar y en algunos caso sin recibir a cambio. Han ido y venido corazones y sentimientos, alguno dejando huellas mas profundas que otros, en un constante reir y llorar, disfrutando y sufriendo a fin de cuentas aprendiendo lo q es querer, lo que es amar.
He hecho de mi vida lo que he querido, he viajado, he conocido gente de aquí y de allá, lugares, momentos, aventuras y miedos. He jugado con la balanza de la vida y la muerte, de la seguridad y la estupidez.
He cometido errores y también tantos aciertos. He sido floja y obstinada, trabajadora y entregada. He sido mujer y niña y mujer de nuevo. He tenido la oportunidad de ser hija, hermana, nieta, amiga y enemiga.  He visto amaneceres y me he comido cielos estrellados noches y noches y noches. Me he olvidado de la belleza del mundo para recuperarla otra vez en mas de una ocasión. He vivido sola y en soledad, acompañada y abandonada. He tratado de ayudar a los demás en todo lo que he podido, he amado lo que hago y he detestado trabajos enteros. He juzgado y definitivamente he sido juzgada por los demás. He lastimado a personas tan importantes para mi y a otras tan inconsecuentes que no me importo hacerlo. He sido honesta y he mentido libremente.  Me he bebido la vida, la he dejado secarse solo para recuperarla en un suspiro. He escrito poemas y cartas de amor disfrutando cada segundo y sufriendo en algunos casos cada palabra. He reído hasta el llanto y he llorado hasta las carcajadas. Me he burlado de mi y me he tomado demasiado en serio. He aprendido a hacer muchas cosas y otras las he dejado a medias. He perdonado las peores ofensas y no he perdonado algunos errores.
Soy mi peor juez y también mi mejor defensa.  He dejado que mis miedos me paralicen demasiadas veces pero he luchado contra ellos en cada ocasión. He cantado hasta perder la voz y he pasado meses en el peor de los silencios. He vivido en grises y en tecnicolor, en tercera dimensión . He invertido mis segundos uno a uno. He sido uno de los seres mas imperfectos pero también mas extraordinarios que he conocido. Lo he sido todo,  he perdido todo, en la cabeza y en el corazón.  He sido obstinada y soberbia, humilde y bondadosa. He sido completamente humana. 
Ahora me queda todo por vivir, por tener, por querer, por disfrutar, por entregar. Me esperan errores y los mejores aciertos, me queda aprender a amar diferente y a quererme diferente. Me esperan mas noches y lunas y estrellas, me quedan todos los atardeceres q harán historia, mas vidas que tocar y mas imperfecciones que descubrir. Me queda realizar mis sueños y tratar de ayudar a mas gente, hacerme mejor y disfrutarme mas. Me quedan abrazos y besos y tanto sexo por realizar. Me queda ser mejor y encontrar a tantas personas que quieran compartir a esta imperfecta persona que tengo la fortuna de ser.  Me queda ver el sol una y otra vez, reír y llorar con toda la pasión y entrega que me caracterizan. Me queda ser intensa en casi todo pues así debe ser la vivida y así deben vivirse los segundos y las horas. Me queda seguir amando y aprender a odiar de verdad (no lo hago muy bien y se me olvida rápido). Me queda tanta gente y tantos instantes. Me queda ir y venir y tener y ganar y perder, todo a granel y a destajo. Me queda vivir, vivir y vivirme. Me queda un in infinito de oportunidades y casualidades y alegrías ; y a ti que leas esto te queda la oportunidad de hacer todo eso también y si tu quieres y solo si lo quieres puedes hacerlo a mi lado!